LA NOCIÓN DEL TIEMPO, TONI KUHN
Años, meses, días. Momentos sublimes que son concebidos y compartidos por un poeta de imágenes.
Nadia Altamirano López
Al principio está oscuro, después nace la luz y de la mano trae la noción del tiempo a medida que dos líneas luminosas se engrosan y se deslizan hacia abajo hasta ser brillantes reflejos sobre el piso de madera.
Las fotos de Toni Kuhn son simples, sólo retratan el tiempo, 34 años de ver el sol salir y ponerse por el horizonte. Miles de horas gastadas en viajes, en quedarse quieto en una calle y mirar el ir y venir de decenas de personas que ocupadas en si mismas desconocen ser objetos de alguien que, con toda consciencia, lleva un registro de sus pasos, del tiempo que dedican a pasar por un lugar en específico.
Mantos de nieve que desaparecen al entibiarse el ambiente, hojas que caen, cadáveres de animales que recién comienzan a enfriarse, la lluvia, el viento que se cuela por las ventanas e infla las cortinas.
El tiempo deja de medirse en horas para convertirse en la huella que deja en otras cosas, en la ropa, en sonidos, sabores, vivencias, recuerdos que inundan la memoria y pueden expandirse o acortarse según la belleza o el horror que evoquen.
Desde el 2002 el libro comenzó tomar forma, el año pasado se publicó “La noción del tiempo” que presenta en 218 imágenes más de tres décadas de trabajo del fotógrafo suizo radicado en México desde 1964.
El libro es editado por Tiempo Imaginario.