Archivo Fotográfico Rodrigo Moya
Se presentó recientemente el catálogo temático preliminar del archivo fotográfico de Rodrigo Moya. Realizado a iniciativa de Florián Sachs, impresor del fotógrafo, y con la venia de éste, en febrero de 2009 el acervo se abrió a las investigadoras Emilia Anastasia Moyén y Berenice Fregoso con el apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, a través del programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales, emisión 2008. Así es como se llevó a cabo el primer acercamiento para ordenar y clasificar temáticamente el Archivo Fotográfico Rodrigo Moya (AFRM) «con base en la metodología archivística para material fotográfico». Cabe destacar que este acervo ya tenía un orden realizado por el propio autor, que era de admirar entre las condiciones en las que, por lo general, descansan los acervos de los fotógrafos. Se lee en este catálogo: «La importancia del legado artístico y documental que representa el AFRM ha sido reconocida en múltiples foros; sin embargo es a partir de mediados de 2002 que se despertó un interés particular respecto al trabajo de este fotógrafo a propósito de su exposición itinerante Fuera de moda. Obra fotográfica 1955-1968, y la publicación del número monográfico dedicado a él en la revista Cuartoscuro«. Las temáticas en que ahora se ha comenzado la clasificación pasan por la arquitectura, los movimientos sociales, reportajes diversos, la Ciudad de México, agricultura, folclor, religión, Latinoamérica -con un capítulo especial para Cuba-, industria y pesca, entre otros. Con el catálogo en mano muchas son las fotos que se antoja mirar, entre los personajes qué tal Rubén Jaramillo, Mercedes Carreño, Celia Cruz, Siqueiros, Carlos Pellicer, Renato Leduc, León Felipe, Ernesto Cardenal. Y respecto de los movimientos sociales: las actividades socialistas, la Nacionalización de la Banca, el Cardenismo en 1988. Entre sus reportajes títulos como: Muñecas Lily, Acapulco, Karate Do, La pasión de Iztapalapa o la Comunidad Judía en Agua Prieta, mueven a la curiosidad. Claro, sin mencionar la series ya conocidas. En fin, catálogo que sugiere e invita a adentrarse en el AFRM y a desarrollar múltiples proyectos.