TRIQUIS CONTRA “GABACHITOS”

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Arlette Carreño

El termómetro pintaba los 28 grados centígrados, la cancha del centro deportivo “Esportiu Municipal Mar Bella”, en Barcelona, reflejaba los intensos rayos del sol veraniego y se convertía en la zona perfecta para jugar con los pies descalzos.

Tiene 11 años de edad. No llega al metro y diez de altura, pero salta como si tuviera la clásica estructura corpulenta de un jugador profesional de baloncesto. Melquíades Ramírez de Jesús porta el número 4 en su pecho y parece estorbarle el calzado cuando se trata de evadir ágilmente al contrario.

La costumbre de sentir la piel en libertad al roce de cualquier terreno, por áspero que esté sea, no se puede evitar en eventos internacionales. El pequeño que sueña con ser fichado por la NBA, es parte de la Academia de Basquetbol Indígena de México (ABIM).

Tras ganar 4 partidos consecutivos en Cataluña incluido el equipo local, llegaban a la final contra París. Algunos de los jugadores doblaban la estatura de Melquíades… el dominio del juego por aire siempre resultó difícil durante la copa de Barcelona.

“Me gustó jugar con los gabachitos, para aprender más y jugar con los altos y así vamos a seguir con este proyecto”.

De tez morena y ojos brillantes Melquíades no sólo demuestra en la cancha de qué está hecho; desde los 5 años de edad hace labores propias de la región: sembrar maíz en el campo para ayudar a sus padres campesinos, incluso caminar hasta 5 horas para llegar a la escuela desde su comunidad en las montañas, así que enfrentar a un equipo con zancadas visiblemente más grandes, no representaba ningún temor.

“La estatura no importa, no los vamos a cargar, pero para los tapones, la estatura es relevante, pero creo que jugando con el corazón y la garra que nosotros hemos llevado a lo largo de todos estos años, eso nos ha ayudado a salir adelante”, decía Abimael García, otro miembro del equipo indígena.

Aquí también retumbó por todo el recinto deportivo el grito popular de los mexicanos …¡eh, eh, eh, eh, Triquis! Y aunque era una comunidad pequeña apoyando a los menores, se escuchaba tremenda multitud, ondeando banderas tricolores.

Como a la mayoría de los integrantes del equipo indígena de las montañas, a Melquíades le cuesta hablar una lengua diferente a la nativa (triqui) y se veía visiblemente desconcertado por la indicaciones en catalán, inglés o francés.

Clavaba la mirada en la canasta de los parisinos, pasaba el balón de una mano a otra con fuerza casi desmedida y, en cada oportunidad que tenía, apretaba fuerte los dientes y sus músculos parecían el resorte necesario al brincar más alto que los altos y robar el juego.

Fueron más de 20 minutos de encestes continuos de ambos equipos. Los parisinos parecían sorprendidos ante batalla de Melquíades y todo el conjunto indígena. Se aferraban al sueño de llevarse el primer lugar a una de zonas más pobres de México; querían repetir lo ocurrido en Argentina 2013.

“Para muchas personas el deporte es un pasatiempo, para nosotros representa una esperanza de vida en las montañas”, señala el entrenador Sergio Ramírez, quien confía en que el programa de educación en las montañas oaxaqueñas que inició hace tres años siga inspirando a nuevos talentos a no dejar la escuela, mantener promedios altos (8.5), leer un libro cada 15 días e incentivar como premio a los viajes fuera del país, para conocer otras culturas a través del deporte.

“Espero que algún día entienda México que la mejor forma de cambiar un país, está en la educación de los niños”, dice.

Hasta el último minuto del partido, el equipo de las montañas puso a sudar a su rival europeo, incluso rabiar de vez en cuando. Por ello lograron la copa Fair Play 2014 como mejor equipo del torneo y subcampeones de la copa Barcelona, al imponerse París 61 a 56.

“Regresan a casa a la misma pobreza, digo, hay niños que tienen 8 hasta 12 hermanos”, comenta el entrenador del equipo, quien fue sorprendido al recibir la invitación de Francia para acudir a la copa que se llevará acabo en marzo del 2015 en la Ciudad de la Luz, como uno de los 8 conjuntos seleccionados con todos los gastos pagados.

* Arlette Carreño Periodista y Realizadora Documental. Tiene un Máster en cine y estudios en fotografía documental. Desde hace dos años vive y trabaja en Barcelona, donde es directora editorial y conductora en Radio Kanal Barcelona 106.9 FM. En México, colaboró para varios medios entre los que se cuenta Canal 11.