FOTOLIBRO. MOISÉS, DE MARIELA SANCARI
Por David Polo
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Desde las primeras páginas, Moisés aparece, difuso y con huecos, se nos muestra como una presencia de la que sólo quedan resquicios por donde se asoman memorias inconexas, fragmentos de una historia que no fue. Dato más preciso: no pudo ser. Las siguientes páginas son un afán constante de llenar los espacios vacíos con presencias sugerentes de lo que de una manera u otra pudo ser, de lo que la autora necesitó que fuera y le fue arrebatado. Con una serie de retratos hechos a desconocidos, que fueron convocados a través de carteles en las calles de Buenos Aires, en Moisés Mariela Sancari realiza una búsqueda de su padre, víctima de desaparición durante el periodo de dictaduras en Argentina. Se trata de la reconstrucción de su pasado, de suplir su ausencia con la imagen de extraños, “de entre 68 y 72 años de edad y con ojos claros, parecidos al señor de la foto —acto seguido el retrato de su padre, Moisés—, para formar parte de un proyecto fotográfico…”, según se lee en el cartel.
En las primeras fotografías un sujeto vira sobre sí mismo. Una espalda en primer plano gira y se convierte en el perfil de un hombre de entre 68 y 72 años… que continúa volteando hasta convertirse en una mirada inquisidora, de ojos claros. El encuadernado del libro, en dos secciones opuestas que se entrelazan y abren una para cada lado, forma parte del discurso construido con las imágenes y las complementa. Hojeándolo da la impresión de que a cada vuelta de página se desentrañan las posibilidades de toda una vida. Cada retrato cuenta la historia de unos rostros cansinos, vetustos, enérgicos, contemplativos, suaves. No se sabe si al final cumplen el requisito de guardar parecido con el señor de bigote y mirada expresiva que aparece en el cartel de la convocatoria, después de todo, los rasgos son lo único que se sabe del Moisés original, el desaparecido. Cuando termina el libro la incógnita permanece. Un conjunto de retratos en close up de un mismo sujeto, con los ojos cerrados y sobre un fondo en tonos cálidos, rematan el diálogo. Moisés pudo ser cada uno de los retratados y sin embargo no es. Sus ojos expresivos están perdidos para siempre.
Mariela Sancari señala en la contraportada: “Moisés es una tipología de retratos de hombres de 70 años, la edad de mi padre si estuviera vivo.»
Moisés, de Mariela Sancari, es un libro editado por La Fábrica en coedición con Hydra y Fundación Televisa. Si deseas adquirirlo o más información haz clic aquí