A 100 años… la Revolución sigue siendo Casasola
El Archivo Casasola, uno de los más importantes y el más antiguo de México con casi cien años de existencia, se une a las celebraciones del centenario de la Revolución con la exposición titulada «A 100 años… la Revolución sigue siendo Casasola». Los fundadores del archivo, Agustín Víctor y Miguel Casasola, fueron pioneros del fotoperiodismo en México durante los años de la Revolución, comenzando un acervo que hoy en día cuenta con unas 300 mil piezas, testimonio de la evolución del país desde 1890 hasta 1970 y resultado del trabajo de tres generaciones del apellido Casasola y de más de 500 fotógrafos.
Agustín Víctor se inició en la fotografía desde 1898, y ya para 1912 había fundado el archivo, que sería la primer agencia de información gráfica en México. Es decir, no se trataba sólo de un banco de imágenes, sino de una verdadera institución periodística. Durante la lucha armada, fue de vital importancia para difundir la información entre las agencias periodísticas de Europa y Sudamérica. Pero igual de importante fue la labor de documentar el conflicto, legándonos una serie de imágenes que los mexicanos vemos en los libros de texto desde la primaria y que después de cien años se han convertido en referentes obligados e inseparables de nuestra historia.
La exposición está conformada por cerca de 90 piezas entre reproducciones y algunas fotografías y postales originales, muchas de las cuales nunca habían sido exhibidas al público. Al recorrerla vemos imágenes que muestran distintos aspectos de la Revolución, de la labor de los Casasola y del México de hace 100 años. Hay, por ejemplo, una fotografía de Agustín Víctor amarrado en lo alto de un poste con una pesada cámara de la época, en un afán por conseguir una buena toma. Y en cuanto a buenas tomas, abundan las referentes a la guerra, como aquella hecha en plena acción, donde un par de soldados federales corren a refugiarse de los disparos de los revolucionarios. O esa otra donde soldados zapatistas cabalgan a contraluz frente a Palacio Nacional en 1914. Las tomas que lograron capturar un gesto o una mirada que lo dice todo, como el retrato a secas de Emiliano Zapata o la fotografía del capitán Fortino Sámano, que fuma un cigarro mientras espera arrogante el disparo del pelotón de fusilamiento. También hay muchas fotografías que retratan un rostro pocas veces visto de la Revolución, el de la cotidianidad. En ella vemos a soldados que junto con sus pequeños hijos recorrieron los largos caminos que llevaban de una batalla a otra; o a las mujeres que con fusil y canana apoyaron la causa. Vemos a Pancho Villa relajado junto a sus hijos y vemos a gente que quizá prefirió desentenderse de la historia, como el par de teporochos brindando en la pulquería o el barrendero de desmedido sombrero que sencillamente hace su trabajo.
Se trata de una exposición con la facultad de hacer recapacitar acerca del tiempo ¿Qué tanto son cien años? Tres cifras parece un número grande, pero su significado se vuelve tangible cuando vemos las fotografías tomadas en la calle de Balderas durante la Decena Trágica. Cuesta creer que en ese escenario lleno de cañones que vemos en las fotos del archivo, hoy haya una estación del metro en cuya salida se venden películas pirata. O que el de hoy sea el mismo centro de la ciudad por donde desfilaron a caballo los zapatistas, cargando orgullosos un estandarte de la Virgen de Guadalupe. En cien años las cosas cambian mucho, y justo por eso es indispensable la inmensa cantidad de imágenes que resguarda el Archivo Casasola. Sin un archivo similar, nombres como Villa o Zapata, que justo este año escuchamos más que nunca, serían sólo eso, nombres. Pero mirando esas imágenes de la ciudad hace cien años, la historia se vuelve algo más vívido, algo menos «platicado». Y mirando imágenes como la del cuerpo de Villa atravesado por 12 disparos, esos personajes de la historia se vuelven algo más humanos. Esos nombres, se vuelven hombres.
Exposición «A 100 años… la Revolución sigue siendo Casasola»
Polyforum Siqueiros, Insurgentes Sur 701 esquina Filadelfia, Colonia Nápoles, México, D.F.
Del 29 de septiembre al 30 de octubre, lunes a domingo de 9:00 a 18:00 horas
Entrada libre
Tel.: 011(52) 5536-4520 al 24
Agustín Víctor se inició en la fotografía desde 1898, y ya para 1912 había fundado el archivo, que sería la primer agencia de información gráfica en México. Es decir, no se trataba sólo de un banco de imágenes, sino de una verdadera institución periodística. Durante la lucha armada, fue de vital importancia para difundir la información entre las agencias periodísticas de Europa y Sudamérica. Pero igual de importante fue la labor de documentar el conflicto, legándonos una serie de imágenes que los mexicanos vemos en los libros de texto desde la primaria y que después de cien años se han convertido en referentes obligados e inseparables de nuestra historia.
La exposición está conformada por cerca de 90 piezas entre reproducciones y algunas fotografías y postales originales, muchas de las cuales nunca habían sido exhibidas al público. Al recorrerla vemos imágenes que muestran distintos aspectos de la Revolución, de la labor de los Casasola y del México de hace 100 años. Hay, por ejemplo, una fotografía de Agustín Víctor amarrado en lo alto de un poste con una pesada cámara de la época, en un afán por conseguir una buena toma. Y en cuanto a buenas tomas, abundan las referentes a la guerra, como aquella hecha en plena acción, donde un par de soldados federales corren a refugiarse de los disparos de los revolucionarios. O esa otra donde soldados zapatistas cabalgan a contraluz frente a Palacio Nacional en 1914. Las tomas que lograron capturar un gesto o una mirada que lo dice todo, como el retrato a secas de Emiliano Zapata o la fotografía del capitán Fortino Sámano, que fuma un cigarro mientras espera arrogante el disparo del pelotón de fusilamiento. También hay muchas fotografías que retratan un rostro pocas veces visto de la Revolución, el de la cotidianidad. En ella vemos a soldados que junto con sus pequeños hijos recorrieron los largos caminos que llevaban de una batalla a otra; o a las mujeres que con fusil y canana apoyaron la causa. Vemos a Pancho Villa relajado junto a sus hijos y vemos a gente que quizá prefirió desentenderse de la historia, como el par de teporochos brindando en la pulquería o el barrendero de desmedido sombrero que sencillamente hace su trabajo.
Se trata de una exposición con la facultad de hacer recapacitar acerca del tiempo ¿Qué tanto son cien años? Tres cifras parece un número grande, pero su significado se vuelve tangible cuando vemos las fotografías tomadas en la calle de Balderas durante la Decena Trágica. Cuesta creer que en ese escenario lleno de cañones que vemos en las fotos del archivo, hoy haya una estación del metro en cuya salida se venden películas pirata. O que el de hoy sea el mismo centro de la ciudad por donde desfilaron a caballo los zapatistas, cargando orgullosos un estandarte de la Virgen de Guadalupe. En cien años las cosas cambian mucho, y justo por eso es indispensable la inmensa cantidad de imágenes que resguarda el Archivo Casasola. Sin un archivo similar, nombres como Villa o Zapata, que justo este año escuchamos más que nunca, serían sólo eso, nombres. Pero mirando esas imágenes de la ciudad hace cien años, la historia se vuelve algo más vívido, algo menos «platicado». Y mirando imágenes como la del cuerpo de Villa atravesado por 12 disparos, esos personajes de la historia se vuelven algo más humanos. Esos nombres, se vuelven hombres.
Exposición «A 100 años… la Revolución sigue siendo Casasola»
Polyforum Siqueiros, Insurgentes Sur 701 esquina Filadelfia, Colonia Nápoles, México, D.F.
Del 29 de septiembre al 30 de octubre, lunes a domingo de 9:00 a 18:00 horas
Entrada libre
Tel.: 011(52) 5536-4520 al 24
soy una persona de 70 años nacido en el pueblo de tacuba (calle mar del norte frente a la antigua escueka de ciensas uimicas) he vivido por muchos años fura de mexico y ahora que este medio ( la coputadoa) ha traido tantos beneficios he tratao por todos los medio habido y por haber). el medio o de forma me lleve a econtrar algunas fotogafias de mi barrio querido TACUBA O EL HEROICO PUEBLO DE TACUBA espero alguien me ayude y me lo pueda mandar a mi correo GRACIAS DE LOS AÑOS 1950 A 1980 AÑOS DE NUEVO GRACIAS