PREMIO DEDICADO A COLIMA: TAPIRO
Por Carolina Romero
Los espectaculares escenarios del volcán de Colima, los colores de sus colosales erupciones y la majestuosidad de sus fumarolas, aunadas a la bóveda celeste que las acompañan, han hechizado a Sergio Tapiro de tal modo que, desde 2002, ha pasado días y noches en su mirador esperando el momento justo en que logre capturar con su cámara los instantes únicos con los que aquel cráter de fuego ha inundado sus ojos.
En 2015, una de tantas noches en las que Sergio hacía guardia en el volcán, ocurrió la magia. Tras una poderosa erupción y el golpe de un rayo que iluminó la columna de humo y cenizas, el fotógrafo encontró en su carrete una imagen que le valió ser recientemente nombrado Fotógrafo de Viajes del Año 2017 por National Geographic, y en 2016, fue ganador del tercer lugar de la categoría Naturaleza en el World Press Photo.
Nombrada “El poder de la naturaleza”, la fotografía representa para el colimense un regalo otorgado por la naturaleza misma, la posibilidad de ver un fenómeno impactante y, además, compartirlo con el mundo.
“Todos los fotógrafos de naturaleza soñamos con NatGeo, y es un gran privilegio que esta vez me tocó a mí ser el fotógrafo del año”, comenta. “Mi trabajo es para mi gente, para mi tierra que tanto amo: Colima”.
En 2015, una de tantas noches en las que Sergio hacía guardia en el volcán, ocurrió la magia. Tras una poderosa erupción y el golpe de un rayo que iluminó la columna de humo y cenizas, el fotógrafo encontró en su carrete una imagen que le valió ser recientemente nombrado Fotógrafo de Viajes del Año 2017 por National Geographic, y en 2016, fue ganador del tercer lugar de la categoría Naturaleza en el World Press Photo.
Nombrada “El poder de la naturaleza”, la fotografía representa para el colimense un regalo otorgado por la naturaleza misma, la posibilidad de ver un fenómeno impactante y, además, compartirlo con el mundo.
“Todos los fotógrafos de naturaleza soñamos con NatGeo, y es un gran privilegio que esta vez me tocó a mí ser el fotógrafo del año”, comenta. “Mi trabajo es para mi gente, para mi tierra que tanto amo: Colima”.
A pesar de que sabía que tenía posibilidades, pues el Concurso de Fotografía de Viajes es muy abierto y los editores de medios internacionales compartían constantemente su imagen dentro de sus favoritas, la noticia le cayó de sorpresa; entonces, Sergio saltó, gritó y se emocionó, pero sobre todo se sintió orgulloso.
Para el fotógrafo, la imagen galardonada se ha convertido en un ícono dentro de la fotografía mexicana, y con ella, espera sembrar una semilla tanto dentro de lo fotográfico como en el ámbito científico, y lograr que a alguien más le interese saber sobre volcanes o empezar a tomar fotos.
“Hojear las páginas de la revista, la capacidad de fascinarse, viajar, volar y soñar con lugares hermosos y que existen en el mundo, es una de las razones por las que los fotógrafos de naturaleza tenemos una cámara en las manos”, finalizó.
Para el fotógrafo, la imagen galardonada se ha convertido en un ícono dentro de la fotografía mexicana, y con ella, espera sembrar una semilla tanto dentro de lo fotográfico como en el ámbito científico, y lograr que a alguien más le interese saber sobre volcanes o empezar a tomar fotos.
“Hojear las páginas de la revista, la capacidad de fascinarse, viajar, volar y soñar con lugares hermosos y que existen en el mundo, es una de las razones por las que los fotógrafos de naturaleza tenemos una cámara en las manos”, finalizó.
