CHOLOMBIANOS

Hace más de 20 años, cuando don Joel Luna comenzó a transmitir en la XEH las cumbias que se importaban a la ciudad, nunca imaginó lo que provocaría. Es resultado puede verse en «Cholombianos», de Amanda Watkins, el nuevo libro de Trilce Ediciones, que se presentará el próximo sábado 15 de marzo en la Feria UANLeer de Monterrey. La cita es a las 21:00 hrs en el Escena. Presentará la autora y habrá concierto de música colombiana.
En Monterrey se escuchaban corridos y pop gringo, pero como sucedió en Jamaica con el rythm and blues en los años sesenta, la colección de música colombiana de este disk jockey puso a cientos de jóvenes a bailar los ritmos alegres de la cumbia y se convirtió en el himno de los barrios bajos de la capital del estado.
«Los ‘colombianos regios’ son punks cumbiancheros double jointed que bailan con la agilidad de un breakdancero de Brooklyn y el flavor de un bailongo en Barranquilla. Cuando se hacen retas, nos recuerdan a gallos de pelea, igual de coloridos y ágiles. Al bailar, parecen no tocar el suelo, y con las manos hacen señas tan crípticas como las leyendas de sus gigantescos escapularios de chaquira hechos en casa. En el remolino de la pista de baile, hay chicas que mueven las caderas tan bien que alguien las tendría que asegurar, como Heidi Klum a sus piernas».
«Esta subcultura ha mantenido la industria del gel para pelo a flote con peinados que ni siquiera el calor infernal regio logra derretir. Con sus enormes pantalones kaki perfectamente planchados, sus imágenes de san Judas y sus peinados alucinantes, son el movimiento juvenil más auténtico y emocionante que hay en esta ciudad», dice Esteban Cárdenas.
Y se agrega una definición:
Cholombiano/a s./adj., m. y f. Méx. Dícese del regiomontano que ha adoptado un estilo que mezcla la estética de los cholos y los colombianos. Es una subcultura que se distingue por su gusto por la cumbia colombiana, originalísimos peinados de largas patillas y atuendos que incluyen tenis personalizados, pantalones holgados y camisas hawaianas (con frecuencia confeccionados por ellos mismos). Se dividen principalmente en dos grupos antagónicos: los Símbolo Star y los Símbolo 1. En las fiestas, portan carteles o escapularios gigantes con su nombre, colonia y pandilla para que los sonideros los identifiquen y los saluden por los altavoces. Tienen una manera característica de bailar en círculo y hacen signos con las manos para señalar el grupo al que pertenecen. Pese a sus diferencias, todos son devotos de la virgen, pero, sobre todo, de San Judas Tadeo.
La autora, Amanda Watkins, es una diseñadora de modas proveniente de Inglaterra. Durante los últimos cuatro años ha viajado constantemente entre Londres y Monterrey documentando a los cholombianos y conociendo esta subcultura. Tiene una maestría en Diseño de Modas por el Royal College of Art Masters. Ha sido profesora de Moda en la Universidad de Monterrey. Sus colecciones han aparecido en revistas como Elle (Japón), Commons and Sense (Japón) y Dazed and Confused (Londres).