SCOTT GRAY: IMPULSOR FOTOGRÁFICO
Fluido y con acento perceptiblemente británico, es el modo en como habla Scott. Charlar con él es rememorar la voluntad del acto fotográfico desde la médula: la pasión por la imagen que exuda Scott Gray a sus jóvenes 39 años, quien es fundador y director de la Organización Mundial de la Fotografía (WPO por sus siglas en inglés), es recordatorio de qué tan social y renovable puede, y debe ser, la fotografía.
Durante su visita a México con motivo de la promoción del Mexico Sony Award, en el marco del Sony World Photgraphy Awards 2014, Scott recordó el objetivo principal de una de las más grandes comunidades de fotógrafos a nivel mundial, la WPO, que hasta el momento ha logrado convocar a 150,000 miembros en más de 200 países.
“Sé lo indispensable que es que alguien te de un empujón cuando eres joven, es necesario tener siempre en cuenta tus sueños, pero también lo es que alguien te ayude a alcanzarlos”, para él ese es el propósito de la WPO, que desde hace 7 años ha contribuido al desarrollo de los jóvenes fotógrafos a nivel global. “Tan sólo el año pasado tuvimos más de 122 mil participaciones en el World Photography Awards, nuestro concurso más importante”.
Dar el primer paso es complicado, pero aspirar a consolidar la organización de fotografía más grande a nivel mundial implica un gran compromiso. “Quería saber si existía algún tipo de plataforma que fuera como el Premio Oscar, si comparamos la fotografía con el cine, que sirviera de impulso para los nuevos creadores. Se me ocurrió crear la WPO para celebrar a los profesionales y maestros de la fotografía pero también a los nuevos talentos”.
A partir de un “salto de fe”, como él lo denomina, fue como inició la consolidación de esta organización global; “el apoyo de Sony fue indispensable porque también para ellos representó creer en el proyecto y compartir esa pasión en torno al poder de la imagen”.
“Estamos interesados en encontrar a los fotógrafos de cada nueva generación quienes necesitan una plataforma de lanzamiento para lograr poco a poco el reconocimiento en el ámbito fotográfico, porque si los encontramos, a través de la Organización podemos darles una muy buena exposición… queremos encontrar a ese nuevo talento”.
Tan sólo el año pasado la WPO logró generar 300 mil artículos para quienes participaron en el concurso organizado anualmente por la organización, el Sony World Photography Awards, el cual por su carácter gratuito se ha convertido en el “concurso fotográfico más grande a nivel global”, como asegura Scott. “Se trata de la creatividad y no del tipo de cámara que uses, hablamos de la pasión por fotografiar tu entorno como una forma de autorreconocimiento”.
“Si hemos crecido a este paso tan acelerado es porque, además de conservar una gran pasión en torno a la fotografía, enfatizamos el cuidado de los derechos de autor, apoyamos el trabajo de cada uno de los fotógrafos que pertenece a la comunidad de la WPO y buscamos siempre a ese joven fotógrafo emergente”.
La relación que la WPO mantiene con más de 220 universidades y escuelas de arte alrededor del mundo “nos permite involucrarnos más con los estudiantes, motivarlos a que continúen haciendo foto; con tanta tecnología que tenemos ahora lo importante es que la gente haga imagen, que puedan ponerlo en discusión con otros, generar cambios positivos”.
Sí, existen cambios en las diferente manifestaciones artísticas y son vertiginosos, como diría Scott, “la fotografía, en comparación con la pintura, es relativamente joven pero también necesita ser puesta a prueba por su popularidad, si su práctica se ha magnificado es porque ahora más que nunca es accesible a la mayoría de la gente. Siempre debe acercarse a las personas, socializarse y renovarse”.
El carácter documental de la fotografía no es el único al que Scott Gray se refiere cuando habla de “Foto”, con letra capital en mayúscula, “también el valor de una imagen es su naturaleza imaginativa, por eso la Organización se interesa en motivar la creatividad, porque creemos que la imagen se observa, se siente y se debe ser interpretada desde la identidad de cada persona”.
“Si me preguntaran, después de estos 7 años, qué ha sido lo mejor de este viaje, es cuando la gente reconoce tu trabajo, por ejemplo, el mes anterior en una exhibición que organizamos en Bucarest, uno de los chicos que resultó seleccionado para la exposición final, me abrazó en cuanto me vio”.
El chico rumano, según cuenta, le agradeció porque a partir de este episodio empezó a trabajar profesionalmente como fotógrafo. “Así sé que ese ‘salto de fe’ valió la pena”.
Con una mueca de lado, visiblemente sonriente, Scott Gray se detiene a mirar su reloj de reojo: “es hora de continuar el viaje, tengo un avión que tomar”.
Si te interesa leer más de la WPO visita worldphoto.org
Para más información de los Sony World Photography Awards 2014 entra en https://cuartoscuro.com/revista/2013/11/sony-world-photography-awards-2014/
