PRISIONERO DE GUERRA
Sobre una mesa cubierta de legajos repletos de antiguos papeles, Jorge Carretero se encontró con un texto mecanográfico de 55 cuartillas. Se trataba de una copia del manuscrito original del diario escrito por el Teniente Coronel Cosme Varela en 1868, quien fuera hecho prisionero de guerra por el Ejército Francés en 1863, junto con las fuerzas que capitularon en el sitio a la ciudad de Puebla. Es decir, la Intervención Francesa.
En el texto se narran algunos pormenores del traslado de Puebla a Veracruz, a pie de tierra durante 21 días, y luego el viaje del puerto mexicano a Francia, pero sobre todo, lo acontecido en ese país durante su peculiar cautiverio, en la ciudad de Tours, y luego su repatriación a México después de 13 meses y tres días.
Ese rescate es hoy un libro de largo nombre: Prisionero de guerra del imperio Francés: Diario del Teniente Coronel Cosme Varela, Episodio histórico ocurrido durante la Intervención: 1863-1864. Editado por Fototeca Anticua, A.C. en colaboración con el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Puebla, el cual se presenta este martes 6 de noviembre en Puebla.
Además del valor histórico del texto y de un muy completo capítulo que da contexto a los hechos, escrito por el autor y editor Carretero, este libro tiene un valor excepcional. El lector puede situarse en la historia, convivir con los protagonistas y sentirse en el ambiente bélico de la época al contemplar la increíble colección fotográfica vintage incluida en el libro.
Pueden apreciarse más de 120 imágenes que incluyen no sólo los retratos de importantes personajes de nuestra historia -como Mariano Escobedo, Porfirio Díaz, Maximiliano o Benito Juárez- sino cartas de visita de militares mexicanos y franceses.
Hay también una gran coleccción de tarjetas de visita de algunos de los prisioneros de guerra con sus impecables uniformes y seriedad marcial, así como imágenes que componen un «catálogo de costumbres, de oficios y tipos populares, en escenarios existentes o teatralmente recreados». Ahí está el cargador de fardos, el oficial del Estado Mayor del Imperio con un penacho inimaginable o la marchante de tabaco.
Llaman la atención los mosaicos fotográficos y las vistas estereoscópicas y fotografías que dan cuenta del efecto de morteros y obuses en templos y construcciones de Puebla durante la intervención.
Acompaña al libro un CD con las grabaciones referentes a la Batalla de Puebla, creadas por julio Ayala entre 1905 y 1913, producidas gracias a la colaboración de la Fonoteca Nacional y Conaculta. Es de destacar también el cuidado editorial de la obra y su diseño que parece remontarse a la época de la cual habla.
Los interesados pueden adquirir el libro directamente con el autor en los correos fototecaantica@yahoo.com y jorge.fototecaantica@gmail.com