RENÉ BURRI, IN MEMORIAM
“Ahora todo el mundo sabe de todo, hay que ahondar más allá de la actualidad y proponer un punto de vista personal.
El fotógrafo debe transformarse en un “autor” para contrarrestar a la generación informatizada”.
René Burri
El suizo René Burri (1933- 2014), quien falleció a la edad de 81 años, ha colgado la cámara, y con esto su trabajo fotográfico entra en una pausa inerte. Trabajó en su natal Zurich como documentalista entre 1953 y 1955, año en que publicó por primera vez en la agencia de fotografía Magnum, con un reportaje acerca de niños con problemas auditivos, mismo que fue publicado en la revista Life. Fue entonces cuando su trabajo fotográfico acaparó la mirada internacional.
En 1956 emprendió un viaje fotográfico hacia algunos países de Europa y Medio Oriente. En América Latina produjo un reportaje sobre los «gauchos» que fue publicado la revista Du en 1959. En esa impresión colaboró con retratos de Pablo Picasso, el escultor Alberto Giacometti y el afamado arquitecto Le Corbusier. En ese mismo año se incorporó como miembro de pleno derecho a la agencia fundada por Robert Capa, Magnum.
Mientras trabajaba en Cuba durante 1963, fotografió a Ernesto ‘Che’ Guevara durante una entrevista realizada por un periodista estadounidense. Sus imágenes del famoso revolucionario fumando un habano y apretándolo con una mueca se reprodujeron en todo el mundo.
Burri participó en la creación de Magnum Films en 1965, y luego pasó seis meses en China, en donde se filmó la película «Las dos caras de China», producida por la BBC. Abrió la Galería Magnum en París en 1962 mientras continuaba con sus actividades como fotógrafo; al mismo tiempo experimentó también con la técnica del collage y el dibujo.
René Burri visitó México en septiembre de 2007 con motivo de una exposición titulada “René Burri un mundo”, organizada por la UNAM y auspiciada por el Museo de San Ildefonso. Durante su visita al país concedió una entrevista a Cuartoscuro en donde reveló que para entrevistar a Picasso tuvo que viajar de aventón por París. Confesó además su oposición en torno al concepto de «instante decisivo» de Henri Cartier- Brésson, pues consideraba que existen miles de instantes decisivos. A continuación un extracto de aquella entrevista.
Historia de un cronopio Suizo
Por Anasella Acosta y Galo Ramírez
Como Charles Bukowski lo dijera, en la vida se puede perder todo, menos el estilo, por ello el fotógrafo suizo quien viajó de aventón a París para conocer a Pablo Picasso, y por el camino mostrar su trabajo a la agencia Magnum, no lo pierde. De saco de Lino color Beige, mascada verde, cámara al cuelo y puro en la boca, visitó México para inaugurar la retrospectiva más grande que se haya presentado sobre su trabajo, y que cobija el Colegio de San Ildefonso: René Burri. Un mundo.
En breve charla con Cuartoscuro, Burri, quien ha trabajado en el terreno del fotoperiodismo y la foto artística, reconoce que existen claras diferencias entre ambos terrenos: “la fotografía periodística se utiliza para registrar un evento especifico, pero en la artística puedes formular las cosas de manera diferente, ve la exposición y date cuenta de las diferencias”.
La formación de Burri nace en el diseño, quizá ello tenga que ver con la conciencia del encuadre que se aprecia en sus fotografías, ningún espacio, ningún elemento está de más en el discurso de la imagen. Pero Burri fue más allá y decidió entrar a la escuela de Artes y Oficios para estudiar fotografía en su natal Suiza.
El azar, la fortuna, pero sobre todo el saber ver –y si no, que lo digan el manejo de planos, de sombras, de líneas, la composición geométrica de cuerpos y estructuras-, llevaron a Burri por el mundo para fotografíar a los grandes artistas y personajes que han forjado la historia mundial, cuya lista inició nada más ni nada menos que con Winston Churchill, cuando su padre le dio la cámara y le dijo que alguien importante iba a pasar; él decidió fotografiarlo.
Pero si bien la lista de retratos es enorme y alcanza solidez en sus imágenes, las de Pablo Picasso, sin pasar por alto las del escultor Alberto Giacometti, es la imagen de Ernesto Che Guevara con un puro en la boca, la más conocida y más popularizada en el orbe, claro que esta imagen no arrebata popularidad a la del fotógrafo Alberto Korda.
Respecto de su influencia ideológica como factor decisivo en el trabajo, Burri comentó a Cuartoscuro sobre el irremediable carácter subjetivo de la fotografía: el fotógrafo -dijo- siempre está seleccionado y diciendo, y lo hace con base en su “formación o ideas políticas”.
(…) En la charla Burri expresó que siempre tuvo la cámara lista para cualquier hecho histórico, pero ante todo tuvo ética y prefirió no hacer tomas a sabiendas de que darían la vuelta al mundo. El fotógrafo debe tener “curiosidad, jugar el juego”.
Lee la entrevista completa en la edición 87 de Cuartoscuro (diciembre 2007-enero 2008) puedes adquirir números atrasados. Si te interesa escribe al correo: lallovizna@cuartoscuro.com