OLOR A TIERRA EN LOS MUROS
En el Aula Magna José Vasconcelos del Centro Nacional de las Artes, el próximo jueves 22 de noviembre a las 19:00 horas se presentará el libro Olor a tierra en los muros, de Alma Lilia Roura, con los comentarios de Silvia Fernández, del Departamento de Arte del Centro de Enseñanza para Extranjeros de la UNAM; Esther Cimet, investigadora del el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (CENIDIAP-INBA), y la autora. Moderará la mesa Georgina Alcántara, también investigadora del CENIDIAP, en un evento organizado por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

La publicación tiene como tema central el estudio de cómo los muros del Antiguo Colegio Jesuita de San Ildefonso, en ese momento lleno del bullicio de estudiantes de la Prepa 1, se vistieron con imágenes en busca de un arte mexicano y universal. Siete pintores de dos generaciones levantaron sus andamios en los patios y escaleras. Todos se ocuparon de dos nuevos sujetos históricos: los indios y los campesinos.
El libro es un trenzado del primer muralismo posrevolucionario con algunos temas extra-pictóricos que se respiraban en la década de 1920: el ejido emanado de la Constitución de 1917, la tierra como preocupación nodal del zapatismo o los intereses de los partidos políticos por adueñarse del sector agrario.
La autora da cabida especial al Partido Comunista Mexicano, al que se afiliaron varios pintores sanalfonsinos, así como a un sindicato sui generis, el SOTPE, en el que coincidieron muralistas, escultores, músicos y escritores, con luchadores sociales provenientes de las ligas agrarias.
Las búsquedas y reflexiones plasmadas por los pinceles de Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros y los jóvenes Ramón Alva, Fermín Revueltas, Fernando Leal y el francés Jean Charlot, recogieron versiones personales y contrastantes: indias invisibles, cualidades indígenas, los indios reales y los históricos, su religiosidad sincrética y simbólica, y el protagonismo campesino en la lucha revolucionaria. El relato desmenuza las genealogías pictóricas de cada muralista, alimentadas por ese olor a tierra que aún se percibe en el país como problema pendiente.
La autora Alma Lilia Roura es historiadora por la UNAM e investigadora de arte en el CENIDIAP. En su labor destaca su participación en el montaje inicial del Museo Nacional de Arte. Ha colaborado en catálogos de exposiciones en el INBA. Entre sus publicaciones se cuentan: Los códices Xólotl y Quinantzin, en Atlas de planos técnicos e históricos. Memorias del sistema de drenaje profundo (Departamento del Distrito Federal) y Dr. Atl, volcanes de hielo y fuego (Consejo Nacional para la Cultura y las Artes).



