EN LOS FERROCARRILES

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 En tiempos de Porfirio Díaz la construcción y puesta en marcha del ferrrocarril fue símbolo de modernidad. Fue el transporte por excelencia ocupado por los dueños de las haciendas pulqueras para llevar el neutle a los lugares más recónditos; para los revolucionarios único medio para propagar la liberación de la dictadura porfiriana. Lo que sucedía alrededor de las estaciones de tren, de los grandes patios de maniobras; las personas que trabajaban alrededor del ferrocarril, fue lo que llamó la atención Juan Rulfo  y enfocó su mirada en la cotidianidad de la vida y su convivencia con el ferrocarril.

Uno de los objetivos de la Fundación Juan Rulfo  es dar a conocer el archivo fotográfico del escritor jaliscience por núcleos temáticos, comentó a Cuartoscuro el arquitecto Víctor Jiménez director de la fundación. El proyecto va tomando forma y junto a editorial RM y la UNAM editaron el libro En los ferrocarriles de Juan Rulfo,  en el que a través de 80 fotografías conoceremos la fascinación que tenía el escritor por el ferrocarril.

Las fotografías de Rulfo nos muestran la cotidianeidad que giraba entorno a las vías de ferrocarril, la vida laboral, las mujeres esperando el agua caliente para lavar la ropa, los maquinistas; incluso, Rulfo, se dio el tiempo para recorrer las vecindades de la colonia Guerrero donde habitaban los trabajadores del ferrocarril. Está documentado Nonoalco, Tacuba, Peralvillo, y Tlatilco.

El nacimiento de este libro tiene origen en una exposición «Nonoalco y sus alrededores» curada por Salvador Zarco en 1990 que se presentó en el  museo de los ferrocarrileros que se ubica muy cerca de la Villa de Guadalupe, la exposición no contaba con catálogo, posteriormente se presentó la exposición en la cátedra Juan Rulfo que se impartió en la Instituto de investigaciones Estéticas de la UNAM.

Víctor Jiménez indagó más sobre el afán de Rulfo por realizar fotos del ferrocarril,  lo que comento a Cuartoscuro fue que Juan Rulfo participó con Roberto Gavaldón en la filmación de la película “La escondida” novela escrita por Miguel N. Lira y en la que actuó María Félix. Fueron seis semanas en las que Rulfo documentó lo sucedido durante la grabación. Posteriormente fue invitado a colaborar en el documental «Terminal del Valle de México. Ambos sucesos a mediados de la década de los 50.

El arquitecto recuerda que en ese época el cine de oro mexicana caía en un bache por lo que buscaron Rulfo pensando que su novelas darían un fresco al cine de ahí recuerda que su novela «El gallo de oro» fue adaptada como guión cinematográfico, en el que participaron Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez.

 Paula Millan y Raquel Tibol coinciden en sus textos sobre el interés de Rulfo por los ferrocarriles y ambas citan a José Luis Martínez encargado  en la década de los 50, del área de difusión de Ferrocarriles Nacionales, que Rulfo le manifestó su interés por “hacer fotos del mundo ferrocarrilero”.