ENTREVISTA CON JOEL PETER WITKIN. DEL ARTE VERDADERO Y SU EVOLUCIÓN.
Joel Peter Witkin, autorretrato, 1984.
Por David Polo
En una época en que gran parte de la producción artística apuesta por lo superfluo, alcanzando en ocasiones los límites de la frivolidad, Joel Peter Witkin se ha posicionado como uno de los artistas más críticos y sagaces de las últimas décadas.
Es dificil no sentirse apabullado por sus imágenes punzantes, que hacen gala de una compleja y sutil construcción, poniendo de manifiesto los fragmentos de una sociedad estereotipada para confrontarle con la antítesis de cualquiera de sus sueños y aspiraciones o acaso para colocarla frente a sus perversiones y deseos más ocultos.
La crudeza de sus imágenes y el cuidadoso empeño en la composición de cada una vuelve realidad la paradoja a la que el espectador se enfrenta al pararse frente a la obra de Witkin. Lo que se observa no es otra cosa que la belleza del horror, la pesadilla retratada con una hermosura inesperada y sobrecogedora.
Cuartoscuro: ¿Qué opinas de la manera en que la gente interpreta tu trabajo? Muchos han llegado a pensar que tu obra tiene mucho de perversión.
Joel Peter Witkin: Es una pregunta que puedo responder de esta manera: una persona puede saber con certeza, tal vez sin sentirlo y aún así saber, que su propósito en la vida es hacer arte. Se trata de ignorar los clichés o la producción de cosas que puedan llegar a ser divertidas o cómodas, esa quizá sea el área del arte comercial.
La historia del arte ha sido trazada siempre por creadores originales, por verdaderos autores capaces de crear piezas que trascienden su propio tiempo, son artistas que no les importa tratar de complacer a nadie, comprenden que ese no es el propósito de su creación. El verdadero propósito del arte es educar y elevar la conciencia de su público. Esa es la manera en que las cosas verdaderamente progresan. Si te fijas en la historia del arte, te das cuenta de que las únicas propuestas que perduran son las que logran intrigar y confrontar al espectador, y su potencia se extiende a lo largo de varias generaciones. Por ejemplo, en la época del cubismo, había alrededor de cuarenta mil pintores tratando de ser cubistas, y la verdad es que si lo piensas, hoy sólo son importantes cinco o seis de ellos, porque el progreso siempre se ha dado a partir de un número muy reducido de actores, quizá no debiera ser así, pero esa es la realidad.
CO: Es decir, ¿tus imágenes siempre buscan confrontar?
JPW: No, no estoy siendo serio, pero si totalmente honesto cuando elijo con qué comprometerme y mantener una integridad. No se trata de ser serio, puedes fotografiar la silueta de una botella de manera seria y cumplir una función, y aún así nunca sería lo suficientemente buena. La seriedad siempre tiene que ver con la intención, desde luego, la botella puede ser seria, pero no está a la altura de la conciencia de tus espectadores. En este momento yo estoy produciendo trabajos que no pude haber hecho hace dos años. Es el trabajo que viene desde tu ser interior, que de hecho es de donde todo procede. Es un progreso del Espíritu, de un artista que no está hecho en su mente, un poco en el corazón, y definitivamente en el alma.
CO: ¿Qué opinas sobre el arte contemporáneo y su interpretación?
JPW: Yo estoy convencido, y lo diré hasta que muera, que el gran arte es el que formará parte de la historia, y eso es algo que sólo los verdaderos artistas saben, le pese a quien le pese. Desde que estuve en la academia de arte supe que de todos esos estudiantes sólo una muy pequeña cantidad tenían verdaderamente la gracia o el talento, la fuerza o el carácter para continuar y esa es una cuestión muy importante. De hecho, de las miles de personas que han visto mis fotografías estoy seguro que ninguna posee la misma percepción al respecto, es más, yo sé que sólo muy pocos en realidad lo comprenden.
Lo que realmente nos hace falta hoy en día es conocimiento para entender el arte, para ser honestos, son muy pocas las personas que se consideran verdaderos conocedores. Existen los historiadores de arte, que se consideran a sí mismos como conocedores. Hace poco tiempo leía que Piero della Francesca, quien fue un pintor cuyo trabajo se quedó en el olvido de las historia debido a los cambios políticos y de gobierno en su época, fue redescubierto hasta el siglo XIX por los pintores franceses. También está el caso de Vermeer, que al morir no dejó más que 36 o 37 cuadros y todavía cien años después de su muerte uno podía comprar por poco dinero cualquiera de sus obras maestras; la gente no entiende eso, también es verdad que se trata de algo que la mayoría de los historiadores de arte no han comprendido durante varios siglos.
CO: ¿Cuál crees que es la razón de toda esta incomprensión?
JPW: El problema es que en la actualidad hay gente como Donald Judd que trabaja con base únicamente en la cultura pop, y cada vez más gente piensa que la cultura pop es la verdadera cultura de nuestros días, y no es cierto. La gente comenzó a conocer y consumir arte debido a la industrialización, las publicaciones se incrementaron, cada vez más personas habitaban en las ciudades y la producción artística se fue haciendo más acelerada, la misma fotografía es un proceso casi instantáneo, pero el problema continúa ahí. El problema es la calidad de la percepción en la persona que decide tomar una cámara y decir: estoy haciendo fotos, soy un fotógrafo, eso no es válido, porque entonces sería válido que cualquier persona tomará un soplete por primera vez y dijera: soy un escultor y tampoco es válido; hay mucho más trabajo y esfuerzo físico involucrado en el arte. El verdadero arte siempre enfrenta a los actores de su tiempo, en eso consiste mi trabajo sobre todo en este tiempo en que estamos sumidos en la mierda total en todos los aspectos. A pesar de que hemos hecho importantes progresos como enviar gente a la Luna o pensar en mandar gente a Marte o más lejos, de todos modos el mundo sigue en la misma dinámica. Si el hombre va al espacio lo hace en busca de más posesiones, como cuando en el pasado se trataba de conquistar territorios y naciones. No ha habido ningún cambio y nuestras vidas se han ido degradando, volviéndose menos productivas, menos puras, menos honestas y eso no es para nada bueno.
La fotografía es algo que reta el conocimiento del fotógrafo, eso es algo que aún no comprendemos y quizá nunca lo hagamos, así que yo me evito pensar en algunos términos normalmente aceptados y sé que lo que un verdadero artista hace no es lo comercial. Yo trabajo para hacer feliz a la gente, para hacerlas sentir o incluso creer más allá de lo que puede llegar a ser cómodo.
En una gran parte del mundo pero especialmente en México, no nos han educado en el conocimiento del arte…somos verdaderamente neófitos en la materia…no se ha despertado la sensibilidad del ser humano a partir de las bellas artes cual debiera…nuestra cercanía con un país tan pobre en arte y tan rico en el comercio nos ha acabado de perjudicar! es muy lamentable
Las respuestas de este artista me parecen muy congruentes tratándose de un artista! es cierto no hay valoración en lo que una persona, artista, en lo individual , crea a partir de su percepción del mundo.. sin embargo gracias a los que se sobreponen siguen en pie las obras artísticas…lo importante es que a ellos a los verdaderos , el dinero y el reconocimiento es lo que menos importa, sino e haber creado e ir por más , pero por más obra y no por más posesiones!.. Felicidades artista!