RESCATE FÍLMICO
Al dar a conocer los primeros logros del Laboratorio de Restauración Digital Elena Sánchez Valenzuela, Paula Astorga directora de la Cineteca Nacional anunció que se han logrado rescatar los primeros materiales fílmico coloreados de la Revolución Mexicana, los cuales serán presentados en octubre en Pordenone, el prestigioso festival internacional de materiales de archivos fílmográficos.
Paula Astorga, titular de la Cineteca Nacional, refirió que los materiales de la Revolución Mexicana fueron encontrados en Estados Unidos por el especialista Aurelio de los Reyes y viajaron a México para su intervención.
Agregó que llevar estos pietajes al Festival de Pordenone representa para la Cineteca Nacional un gran orgullo por ser el punto de reunión de los principales laboratorios e investigadores en imagen del mundo.
“Para un cineasta como Amat Escalante –consideró la directora de la Cineteca– es muy importante llegar a Cannes, pero para un restaurador sin duda la máxima plataforma es el Festival de Pordenone, donde el público internacional podrá disfrutar de los rollos de la Revolución cuya duración es de aproximadamente 15 minutos. Actualmente el Programa Archivo Memoria que iniciamos hace unos años tiene ya un acervo de 4 mil rollos y entre las grandes joyas que han sido donadas se encuentra una filmación del traslado de la estatua del Caballito a su nueva ubicación, a mediados del siglo XX”.
Durante la conferencia fueron proyectados algunos fragmentos de los materiales de la Revolución Mexicana restaurados y donde aparecen diversos soldados marchando en los campos, la perturbadora escena de un fusilamiento, así como otra fuerte secuencia de cuerpos calcinados después de una batalla.
Paolo Tosini, quien previamente dirigió el diplomado de restauración en la propia Cineteca Nacional, describió que el trabajo en las imágenes coloreadas de la Revolución Mexicana requirió mucho investigación y procesos muy detallados por parte de los 22 especialistas que actualmente forman parte del equipo, pues de acuerdo con los estándares de la Federación Internacional de Archivos Fílmicos los materiales estaban cercanos a perderse.
“Ante todo –destacó Paolo Tosini– hemos subrayado la ética que debe seguir la restauración de cualquier material, porque ante todo somos artesanos pero a la vez investigadores. No se trata de sentarse solo frente a una computadora, es necesario el contacto manual con los materiales para saber la consistencia, la manera como se encuentra.”
“Primero –explicó– hay que recuperar el color original, se limpian muchas imperfecciones que añade el tiempo a los materiales, pero además hay que tener un cuidado especial en el sonido, por ello ser utilizan equipos de punta que actualmente tiene el laboratorio como lo son el escáner de alta resolución, el Sondor OMAE que reproduce bandas antiguas de cine y el Memory HD, un sistema de telecinado para acervos en formatos de 16mm, 8mm, e incluso Pathé».
Indicó que el formato en DVD no es un respaldo adecuado para resguardar material fílmico, porque la cinta en 35 milímetros es la que tiene todavía mas duración, aunado a que cada archivo se respalda en el formato internacional LTO 5.
Afirmó que los rollos de la Revolución es un material que se vio mucho en el extranjero y nunca en México, nos dimos cuenta por los sellos que tenían sus latas que se vieron en muchas partes de Estados Unidos y llegaron incluso hasta Canadá.
Nelson Carro, subdirector de Programación de Cineteca nacional, celebró a su vez que como parte de este programa de restauración haya sido posible colaborar con la Cinemateca Uruguaya para rescatar la primera película de ficción de ese país llamada Alma de la costa, que fue estrenada en 1923.
Los primeros 40 años la película estuvo guardada en la casa de su director, quien no era cineasta sino un médico rural y posteriormente la descubrió la Cinemateca. Fue a través de diversas gestiones culturales que se logró esta colaboración entre las dos naciones, por ahora la cinta ya esta completamente digitalizada para garantizar su permanencia».
Nelson Carro narró que la cinta es una suerte de melodrama al estilo de las cintas italianas que se desarrolla en un pueblo de pescadores y su rescate es indispensable para la historia fílmica internacional.
“Este año cumple 90 años de existencia y la idea es poder llegar a una versión que pueda ser exhibida con condiciones de imagen y color cercanas al original, par ello es necesario hacer toda una investigación casi arqueológica para saber la genealogía de la cinta”, detalló.
Paula Astorga señaló también que como parte de este proyecto de preservación fílmica la Cineteca Nacional ha logrado la digitalización y restauración del trailer de la cinta Enséñame a besar, realizada en 1952.
“Hasta el momento no hemos encontrado una copia de esta cinta en ningún acervo, quizá un día se encuentre en algún archivo o en alguna casa, pero mientras tanto, para dar fe de que existe, se ha realizado esta restauración de sus avances”, expresó.
“Por ello no es coincidencia que nombráramos al laboratorio Elena Sánchez Valenzuela porque ella fue la primera encargada del Departamento de Supervisión de Cinematografía en México y en el gobierno de Manuel Ávila Camacho se convirtió en la directora de la primera Filmoteca, por ello esta es una manera de rendir tributo a su memoria e inspirar a nuevas generaciones”, concluyó Paula Astorga.
(Información de CONACULTA)