RECLAMO SILENTE, RASGOS COMUNES DE LORETO VILLARREAL

Por Cynthia Pérez
A la mirada se le atribuye la capacidad de transmitir emociones, de comunicar la esencia del que mira: la bondad, el amor, el enojo. Escritores, poetas, pintores y artistas en general han trabajado obras completas bajo esta premisa, con la convicción de poder adivinar un mundo sólo con asomarse a los ojos de alguien.
En el proyecto Rasgos comunes la fotógrafa regiomontana Loreto Vilarreal retrata niños y lo que encontró en sus ojos es un reclamo silencioso, un cuestionamiento sobre el futuro que les están forjando todos los adultos en su entorno, planteamiento que la artista pretende hacer extensivo para todos los que observen las piezas de esta serie.
Las imágenes que integran el trabajo son rostros de niños en blanco y negro con el semblante serio, eventualmente es difícil reconocer su género. Esto genera una sensación de ver la misma foto una y otra vez al quitar de la imagen cualquier elemento que pudiera dotar de particularidad al retratado.
[slideshow_deploy id=’48508′] La artista asegura que esa es la intención, mantener las similitudes de los rostros, evitar distracciones en la imagen para que el espectador pueda concentrarse en la fuerza de la mirada de cada niño e interpretar lo que expresan.
Quizá a manera de reforzar el discurso que sustenta su obra, la técnica empleada permite que en cada par de ojos se refleje la artista, generando en cada foto un autorretrato por duplicado, detalle que cuida mucho en su serie que consta de más de 500 imágenes.
Para Villarreal Rasgos comunes es un proyecto de vida que inicio en el año 2000 y continuará indefinidamente. La serie nació como un proyecto contratado por coleccionistas y las fotos son de los hijos, esposos, esposas y familia de estos particulares.
El trabajo se ha ido ensanchando hasta actualmente estar trabajando en retratos de celebridades y en general ampliando la colección.
[slideshow_deploy id=’48501′] En entrevista con Cuartoscuro la fotógrafa reconoció que la mirada de los niños fotografiados, que pertenecen a cierto nivel social, nunca será igual a lo que puedan expresar los ojos de niños que viven en otras condiciones.
Comentó que trabajar hasta el momento Rasgos comunes a través de coleccionistas está permitiendo las condiciones para que pueda financiar por su cuenta la ampliación del proyecto y poder integrar fotos de otro tipo de personas en la serie.
Después de exponerse en el Centro de las Artes de Nuevo León en 2010, y formar parte de la colección del Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, la muestra Rasgos comunes se inaugura hoy en el Museo Archivo de la Fotografía y estará abierta al público hasta el 23 de octubre en Guatemala #34, Centro Histórico.