PORTAFOLIO. VIDA COTIDIANA, EMILIO ESPEJEL

Por Cynthia Pérez
[slideshow_deploy id=’46096′] Por definición la cotidianidad, lo cotidiano, tiene que ver con la rutina, a su vez la rutina es costumbre, hacer algo de manera práctica y automática. Las imágenes de vida cotidiana de Emilio Espejel son una confrontación a estos términos.
Es necesario saber que el día a día es distinto para cada individuo, sobre todo cuando la rutina consiste en mirar exhaustivamente para identificar el momento preciso que merezca y pueda plasmarse en una sola imagen.
La cotidianidad se revela entonces como una sucesión de instantes que escapan al hábito y la costumbre, y es precisa la presencia de un tercero que pueda notarlo, o mejor aún, dejar testimonio de ello; el sopor de los otros es una veta visual y fotográfica para Espejel.
Una simple caminata, el dolor de la pérdida, el trabajo duro en la calle, gente que va a algún lugar, alguien que duerme, un perro, sombras, líneas, personajes haciendo nada justo en el momento y el lugar precisos acompañados de elementos cómplices que permiten una composición armoniosa y estética; cada elemento se vuelve vital y preciso para construir mini historias, dar lógica, sentido y valor a cada una de las imágenes capturadas a través de la lente.
Emilio Espejel comparte en su portafolio de vida cotidiana instantes que vemos repetirse a nuestro alrededor todos los días, sólo que lo hace desde su apreciación y visión, lo que agrega un valor a la rutina de lo fotografiado y por añadidura a la del espectador.