ENTREVISTA CON ALEJANDRO CARTAGENA. CURIOSO DE LA IMAGEN

Por Agueda Cerón
El trabajo fotográfico de Alejandro Cartagena aborda los temas que le afectan o que trata de entender, podría decirse que Alejandro es un curioso de la imagen, al preguntarse el porqué de lo que pasa a su alrededor. Esto lo trata de capturar siempre con un toque de sutileza y lo hace al buscar otro enfoque que no se ligue directamente al tema.
Lo que pretenden algunos de sus proyectos es problematizar la manera en que se ve la foto, construir todo un discurso visual con sus imágenes y que el espectador trate de asimilar y contraponerlas para crear un nuevo significado.
Alejandro es un fotógrafo al que le gusta investigar y buscar varias perspectivas, es alguien que trata de opinar desde su arte sobre lo que ocurre en el entorno donde se encuentra.
Cuartoscuro: ¿Por qué escoger la fotografía como un modo de vida?
Alejandro Cartagena: Yo llegué a la fotografía por un poco de casualidad y de causalidad.
En mi casa siempre había fotos, mi papá era un aficionado y había muchos álbumes familiares. Cuando me vine de República Dominicana a México, esos álbumes fueron muy importantes porque podía regresar una y otra vez para encontrarme con ese pasado que ya era lejano. Veía muchas fotos, más que ser fotógrafo al principio lo que me interesaba era el efecto que tenían las imágenes en las emociones y en como piensas sobre lo que ha pasado en tu vida.
Mi primer trabajo fue en una Fototeca. Durante cinco años escaneé  fotografías antiguas de otras personas y me tocó ver muchísimas imágenes, así sacie la necesidad que tenía de ver cómo la gente respondía a la foto. A partir de imágenes de otros fotógrafos aprendí no sólo a verlas sino a escribir sobre ellas, imprimirlas y eso también me ayudo a formar mi mirada fotográfica.
Fue un proceso orgánico no planeado, fue lo que me tocó.
CO: ¿Qué es lo que buscas al tomar una fotografía?
AC: Para mí, como productor, son muchas cosas.
La imagen fotográfica viene de  repente a ser  la excusa de cuadrar una idea que tengo en la cabeza, es abstracta, entonces salgo con mi cámara y trato de hacer enunciados que de alguna manera sugieran esta idea.
No me interesa la fotografía literal, me interesa la fotografía como herramienta que vuela por arriba de una idea pero nunca  termina de aterrizar al cien por ciento sino que te está dando diferentes posibilidades de como pensar esa idea y mi trabajo es sobre esto.
Desde que empecé a fotografiar la ciudad la he tomado siempre con esta intención, de estirar para saber que tanto puedo ver de un sólo tema.
Estamos en un momento histórico donde no podemos basarnos en las verdades únicas y omnipresentes, ni como ciudadanos ni como creadores.  Estar en busca de más allá de lo obvio, esto es como mi labor poética de alguna manera. Eso es para mí la foto.
CO: ¿En tu trabajo qué es lo que predomina: el hecho social, el arte, la composición o es una mezcla de todo?
AC: Definitivamente es una mezcla de todo, en algunos proyectos se inclina más para un lado que para otro, depende del sujeto o de cómo se resuelve.
Al ser fotógrafo, al ser creador, artista, tienes una serie de  herramientas, tienes un problema enfrente de ti y debes encontrar como solucionarlo. De repente el tema o el sujeto que tienes que fotografiar obedece a que sea resuelto de una manera más estética que conceptual o más en formato de libro que de exposición, cada tema responde a una respuesta específica de cómo se resuelve formalmente, hay que pensar en eso y ser honesto con tu producción, no forzar las cosas.
CO: A los que tratan de incursionar en el mundo fotográfico ¿Cuál es el consejo que les darías?
AC: Cada caso, cada personaje, cada fotógrafo tiene su manera de ser y debes empezar por entender que no puedes hacer lo que hizo otro fotógrafo, eso es fundamental, olvidarte de ser envidioso es importantísimo porque nadie tiene las mismas circunstancias de vida, culturales, sociales, de ciudad para que puedas pasar por las mismas cosas.
La cosa más importante para mí como fotógrafo, que me ha ayudado muchísimo desde que empecé hacer imágenes es aprender a terminar mis trabajos.
Entonces agarrar tus proyectos fotográficos empezarlos, desarrollarlos y terminarlos, es la herramienta fundamental que nos puede distinguir de la masa que hace hoy en día fotografía y que tu carrera como fotógrafo evolucioné. Si no haces eso no vas a llegar a ningún lado, porque hacer buenas fotos eso lo puede hacer cualquiera.
Puede ser que cinco buenas imágenes las hagan un millón de mexicanos, quince buenas imágenes tal vez mil mexicanos, terminar sus proyectos tal vez cien mexicanos, entonces tú debes de estar en esos cien que tienen la capacidad de empezar y terminar sus proyectos, demostrar que tienes una coherencia técnica, estética, de principio a fin y eso va a ser la garantía para que te contraten. Terminar tu proyecto es una manera de presentarse ante la sociedad, eso es lo que pienso.
 
Alejandro Cartagena nació en República Dominicana, pero llegó a México desde el año 1990, actualmente radica en Monterrey. Ha expuesto de manera individual en países como Guatemala, Canadá, Estados Unidos, Inglaterra, Italia y China, además de colaborar en más de 50 exposiciones colectivas y ha sido premiado con el Book Award de la fundación Photolucida, Lente Latino en Chile y por el premio del Insituto Italo-Latinoamericano en Roma.
Puedes conocer más de su trabajo en https://alejandrocartagena.com/h/home/